Un día después de que Mauricio Macri lanzara un plan de consensos, Nicolás Dujovne, ministro de Hacienda, presentó la reforma tributaria, que llegará en los próximos días al Congreso. «El objetivo es reducir el déficit y la presión impositiva», comenzó, y agregó: «Queremos promover la inversión, la competitividad y el empleo de calidad para tener un sistema tributario más equitativo, eficiente y moderno».
Luego, Dujovne, a través de una presentación de diapositivas, detalló cuáles serán los principales impuestos que se modificarán: aportes y contribuciones de la seguridad social, Impuesto a las ganancias en personas y empresas, IVA, Impuesto sobre créditos y débitos bancarios, Impuestos internos, Ingresos brutos, sellos y aduanas interiores (acuerdo con provincias), Impuestos ambientales a combustibles y la transferencia de inmuebles, que se elimina.
Sin embargo, el ministro aclaró que será «de implementación gradual, en un período de cinco años». «Vamos a generar las condiciones para que Argentina pueda transitar el camino hacia el desarrollo», sostuvo.
Dujovne detalló que los impuestos al trabajo, que oscilan hoy entre el 17% y el 21%, bajarían a 19,5%. Asimismo, la renta corporativa bajaría del 35% al 25% para los que reinviertan utilidades; el impuesto a los movimientos bancarios se elimina e Ingresos brutos baja en promedio a la mitad.
También habrá una «implementación de mínimo no imponible para contribuciones patronales y un pago a cuenta de Ganancias: el 100% de pago de créditos y débitos se tome a cuenta de Ganancias, será solo un mecanismo de retención con el tiempo».
El Impuesto a las Ganancias de las empresas bajará de forma progresiva del 35% al 30% en 2019, y luego al 25% en 2021.